Ruega
por nosotros Gloriosa SANTA CATALINA, para que seamos dignos de alcanzar las Promesas
y gracias de Nuestro Señor Jesucristo. Amen. ORACION Oh!
Dios que te dignaste revelar tu Santa Ley a Moisés en las cumbres del monte
Sinaí y que para honrar a tu gloriosa sierva Virgen y Mártir Catalina,
hiciste colocar su cuerpo en ese mismo monte, por ministerio de los ángeles,
concédenos te pedimos que por sus méritos e intercesión logremos
subir al monte santo que es Cristo que contigo vive y reina por los siglos de
los siglos. Amen. DIA
SEGUNDO SOBRE
LA ESPERANZA DE SANTA CATALINA Dios
es quien reside la sabiduría por excelencia, ha formado el corazón
del hombre como un vaso que sólo se colma con el dulce sentimiento de la
esperanza; mientras más grande es el objeto que anhelamos, más complacencia
experimentamos en esperarlo y sólo sentimos quietud en el momento de la
realidad. Los primeros cristianos, guardando dentro de su pecho las promesas del
antiguo y nuevo testamento, veían su grandeza, conocían su valor
y levantando sus ojos al cielo, abatidos por el sufrimiento, sabían que
aquel gran Ser, aquel Rey de Reyes, que estaba sentado sobre su creación,
que la sostenía con su aliento y que la regía con su acto leve de
su voluntad, no podía faltar a su palabra. Mientras más grande y
poderoso es el que promete, mayor esperanza engendra su promesa; en los primeros
cristianos vivificando el sentimiento de la esperanza y robustecido por la fe
y demás heroicas virtudes que practicaban, subió hasta el punto
que llegó bien pronto a convertirse en confianza; por esto tranquilamente
dejaban la vida y se gozaban aún cuando eran combatidos por los tormentos.
Sucedía
a ellos lo que al viajero que entra a un desierto plagado de fieras y de peligros;
al principio de su camino se le presenta un poderoso monarca, dueño exclusivo
de aquellas vastas regiones y mostrándole la ruta le ofrece, se le sigue
en propiedad una deliciosa comarca en la que hallará cómodas habitaciones,
jardines deliciosos, bosques cargados de exquisitas frutas, fuentes mas puras
que el cristal y más frescas que la nieve, en fin cuanto pudiera servirle
para su descanso, para su salud y para su recreo. Con que cuidado iría
este viajero por la vereda indicada y cómo esquivaría apartarse
de todos los horrores del desierto. Así los antiguos cristianos, confiados
en las promesas del Dios de las misericordias, veían al mundo como un vasto
desierto, sus pompas como una quimera, sus fiestas y sus espectáculos como
lazos tendidos a la inocencia y a la virtud. Así lo vio SANTA CATALINA
de ALEJANDRIA. ORACION Oh!
Santa Virgen, Tú que nutriste tu esperanza tan cuidadosamente, que la elevaste
a entera confianza, intercede con Dios, a quién alabas, que derrame en
el corazón de todos los cristianos este precioso bálsamo y la gracia
que pedimos en esta novena si fuera para nuestra salvación y conforme a
la divina voluntad. Amen. (Petición como el primer día). DIA
TERCERO LA
CARIDAD DE SANTA CATALINA El
primer precepto del Decálogo es la preciosísima caja de oro que
encerrará para siempre el incomparable tesoro de la caridad cristiana;
esta fue la primera palabra que pronunciaron los sabios omnipotentes del Señor
en el monte Sinaí, entre el estruendo espantoso de su gloria, y hasta el
fuego deslumbrante de su majestad. Caridad que fue la divisa del Dios hombre;
desde el pesebre hasta el calvario, no otras huellas que las de su caridad y de
su amor, su predicación y sus estupendos milagros iban siempre iluminados
por el resplandor indeficiente de su ardentísima caridad. Amor a Dios y
a nuestros semejantes y a todo lo que existe y tiene su origen en Dios, he aquí
el secreto de la eterna bienaventuranza, nada hay mas dulce, mas consolador, ni
mas tierno que esta preciosa virtud; ella llora por el dolor ajeno, y procura
siempre enjugar con mano compasiva las lágrimas que vierte el dolor. Los
cristianos primitivos comprendían muy bien la excelencia de esta preciosa
virtud. Armada de ella SANTA CATALINA intentó sustraer a Maximino de sus
errores y de sus crueles atentados. ORACION Derramad,
pues, ¡Oh! Caritativa Virgen de Alejandría, sobre todos los hombres
desde esa Jerusalén dichosa en que habitas, los ardientes destellos de
tu caridad, para que amándonos mutuamente y perdonando las injurias de
nuestros enemigos podamos alcanzar a Dios, que nos perdone y la gracia que en
esta novena le pedimos, si es para su mayor Gloria y bien de nuestras almas. Amen.
(Petición como el primer día). DIA
CUARTO LA
SABIDURIA DE SANTA CATALINA El
principio de la sabiduría es el temor de Dios, el cual tiene su trono en
las alturas: En esta preciosa fuente, cuyas aguas saltan hasta la vida eterna,
bebía la ilustre princesa de Alejandría, apoyada desde los primeros
años en el santo temor de Dios. Bajo esta tutela comenzó la Virgen
Catalina a estudiar las ciencias sagradas y profanas con un éxito brillantísimo.
Citada por el emperador para que sostuviese una controversia religiosa con cincuenta
filósofos escogidos entre los más sabios del Imperio, penetró
en el salón llena de modestia y compostura, ocupó el asiento que
se le designó, oyó con tristeza los sofismas, sutilezas y errores
que se proponían; todo lo resuelve y pulveriza con tal bizarría
que todos aquellos sabios quedan confundidos, apoyada siempre Catalina en aquella
divina unción recibida de lo alto. Los filósofos convencidos ya
abrazan las creencias de Catalina, bendicen mil veces su derrota y otras tantas
a su vencedora. ORACION Ilustrada
y Sabia Princesa, triunfa a nuestra obstinación como triunfaste de los
filósofos de Alejandría y alcánzanos por tus ruegos la gracia
de conocer más íntimamente a nuestro Dios, para amarlo con mayor
intensidad y alcánzanos también el favor que pedimos en esta novena,
si fuere del querer divino y para nuestra eterna dicha. Amen. (Petición
como el primer día). DIA
QUINTO HUMILDAD
DE SANTA CATALINA La
mano poderosa que empujó al faraón de su trono y se sepultó
con sus huestes en las amargas aguas del Mar Rojo, en castigo de su soberbia ha
sido la misma que todos los tiempos ha hecho temblar la tierra, arrasando y confundiendo
con el polvo a los soberbios para hacerles sentir lo importante de sus miserias.
A esta mano está reservado únicamente el poder de anonadar el orgullo
de las naciones y de los potentados como también el engrandecimiento y
exaltación de los humildes. A ella debió Catalina de Alejandría
su nacimiento ilustre, sus talentos, su sabiduría, su hermosura, sus gracias
y sus virtudes todas, entre las cuales sobresaltan su humildad como el torreón
de un baluarte sobre toda la fortaleza. Jamás tuvo en cuenta ni sus dotes,
ni sus gracias, ni aún la victoria que había conseguido sobre los
cincuenta sabios. Su ilustrada razón le hacia conocer que ella no era mas
que un débil instrumento de la providencia para la realización de
los altos fines de su sabiduría inescrutable. Ella
se consideraba como una débil caña que nace al pie de gigantesca
e inaccesible montaña, en todo lo que hacia no veía sino a Dios,
y solamente la Gloria de El era para ella su norte, su primera y más sagrada
obligación era anonadarse ante este sol brillante de justicia que anima
y vivifica el universo. ORACION Humildísima
Virgen SANTA CATALINA, nosotros te pedimos rendidamente, que nos alcances el sublime
don de la humildad, para que reconociendo nuestra miseria volvamos nuestros ojos
a aquel Dios infinitamente Santo a quien tu serviste y honraste con tan preciosa
virtud, y alcánzanos de El la gracia que por tu intercesión pedimos
en esta novena, si es para su mayor Gloria y salud de nuestras almas. Amen. (Petición
como el primer día). DIA
SEXTO LA
PRUDENCIA DE SANTA CATALINA La
divina providencia que hace resplandecer en todas las cosas, su sabiduría
insondable, nos ha dado la prudencia, virtud preciosísima que consiste
en saber aplicar todos los medios que están a nuestro alcance y conseguir
de este modo el bien sumo que es la felicidad suprema. La prudencia es la
compañera luminosa de la razón. Por ella entrevemos los riesgos,
evitemos los peligros, y tomamos aquellas medidas que nos sirven de salvaguardia
y protegen la vida. Ella
mueve la mano del austero penitente para macerar sus carnes cuando le agita la
tentación. La Virgen Catalina, empleó todos aquellos medios que
esta preciosa virtud pudo sugerirle para no anonadar jamás la santidad
de su alma y la pureza de su corazón. Ella estaba como el centinela vigila
al frente del enemigo; ella no descuidaba ni un instante, ni dejaba escapar la
más leve circunstancia que pudiera conducirla a su único y suspirado
fin que era el de su eterna salvación. ORACION Oh!
Gloriosísima Virgen SANTA CATALINA, por aquel don preciosísimo de
la prudencia con que fuiste adornada, alcánzanos de la divina bondad, el
que seamos prudentes en escoger y aplicar los medios de nuestra salvación
y pídele también nos otorgue la gracia que le pedimos en esta novena
si ella fuere de su divino agrado y para nuestro provecho eterno. Amen. (Petición
como el primer día). DIA
SEPTIMO LA
JUSTICIA DE SANTA CATALINA Este
bello atributo de la divinidad lo ejerce para juzgar a los hombres en el momento
supremo de la muerte, y a las naciones, en medio de sus extravíos y de
sus errores y lo ejercerá el último día de los tiempos para
juzgar a la faz de todos los pueblos de la tierra a toda la humanidad; desde el
culpable Adán hasta el más ignorado de los mortales. Este tributo
ha descendido del cielo, habita con los hombres y ha venido a ser su más
rico patrimonio; tesoro celestial que nos asemeja a la divinidad cuando lo ejercemos;
dar a cada cual lo que le corresponde en justicia, he aquí la esencia de
la virtud, el atributo de Dios. La Virgen Catalina entendió perfectamente
el desempeño de esta virtud: Desde sus tiernos años empezó
a devolver al Dios de las bondades cuanto había recibido de su misericordia;
sus talentos no los emplea sino por El y para El. ORACION Dichosísima
Virgen Catalina, desde ese trono de Gloria en que habitas cantando dulcemente
las alabanzas del Señor, protege a tus devotos y alcánzanos la virtud
de la justicia y el favor que solicitamos en esta novena, si fuere conforme a
la voluntad del Altísimo. Amen. (Petición como el primer día). DIA
OCTAVO LA
FORTALEZA DE SANTA CATALINA Ni
el satánico furor de los tiranos, ni la avinagrada presencia de los verdugos,
ni la espantosa rueda que constituía el tormento, fueron capaz de inmutar
el hermosísimo rostro de la doncella cristiana; ella se adelanta con paso
firme hacia aquel lugar de horror para los espectadores pero de gloria y triunfo
para la santa, pues con sangre iba a sellar en él la, verdad de su creencia
y a confesar de una manera solemne al Dios uno y trino, a quien adoraba y de quien
había recibido tantas gracias, tantos beneficios y el preciosísimo
don de la fortaleza que allí la sostenía. El alma de Catalina no
solo permanecía tranquila sino que rebosaba de alegría, la que asomaba
en todo su rostro del modo más expresivo en todas las formas de su semblante
y particularmente en sus encantadores ojos, que no se saciaban del espectáculo
que los ángeles le presentaban en aquellos felices instantes, uno le comunicaba
la fortaleza de Sansón, otro llenaba su corazón de la caridad del
Apóstol, aquel le dejaba entrever la preciosísima palma de las vírgenes
y este le mostraba de lleno la esplendorosa corona de los mártires y todos
estaban destinados a embalsamar sus heridas y a recrear sus oídos con los
dulces encantos de la celestial armonía. ORACION Oh!
Fortísima esposa de Jesús, alcánzanos de tu divino esposo
la virtud de la fortaleza para que podamos vencer a nuestros comunes enemigos
poniéndonos a cubierto con esta preciosa virtud en todos los combates contra
el enemigo, en todas nuestras tentaciones y peligros, y alcánzanos con
tu poderoso influjo lo que pedimos en esta novena, si fuere para mayor gloria
de Dios y en bien de nuestra salud. Amen. (Petición como el primer día). DIA
NOVENO LA
PUREZA DE SANTA CATALINA Los
labios manchados de los hombres no pueden proferir frases dignas para ensalzar
como corresponde la incomparable virtud de la pureza, los ángeles únicamente
pudieran expresar el valor inmenso de esta virtud el mismo Dios, puro por excelencia
fija complacido sus divinales ojos en la resplandeciente pureza. Esta virtud que
atrae las miradas de un Dios y que le hace sus delicias, la poseyó en el
más alto grado la Virgen Gloriosa de Alejandría. Fue
ella tan pura como la brisa de la mañana que mece dulcemente las flores
y les obliga a exhalar sus perfumes y sus aromas que suben hasta el cielo. ORACION Oh!
Purísima Virgen y Mártir Catalina, esfuerza hoy tu voz virginal
hasta que resuene en el trono del Omnipotente; suplícale interponga los
méritos de tu esclarecida pureza y de todas tus virtudes, para que nos
hagas fieles imitadores tuyos y que consigamos la gracia que en esta novena hemos
pedido, si ella hubiere de ser para gloria de El y de nuestra felicidad eterna.
Amen. (Petición como el primer día). ORACION
DE UNA MADRE DE FAMILIA A LA SANTISIMA VIRGEN María,
Virgen pura y sin mancha, casta esposa de José, madre tierna de Jesús,
modelo perfecto de las mujeres cristianas, y de las madres, a Vos me dirijo con
el corazón lleno de confianza, me postro a vuestros pies con el más
profundo sentimiento de veneración e imploro vuestro socorro. Virgen poderosa,
ved mis necesidades y las de mi familia; escuchad los deseos de mi corazón,
al vuestro los confío, al vuestro que es tan bueno y tan compasivo, obtenedme
de vuestro divino hijo la gracia de que yo comprenda bien toda la extensión
de mis deberes y que los llene todos sin vacilar, y sin dejarme arredrar por las
dificultades, ni abatir por los desengaños. Solicitad
para mí el temor de Dios, el amor a mi casa, el gusto al trabajo y a las
cosas santas, la dulzura, la paciencia, la sencillez, la prudencia, la moderación,
el orden, la economía, en fin, todas las virtudes que el Apóstol
recomienda a las mujeres cristianas y que constituyen la dicha y el ornamento
de las familias y a la vez atrae a ellas las más dulces bendiciones del
cielo. Enseñadme a honrar a aquel a quien estoy unida como vos honrabais
a San José, como la Iglesia honra a Jesucristo, que encuentre en mí
una compañera según lo desea su corazón, sumisa, adicta,
pura y siempre fiel, que semejante a la mujer fuerte del evangelio, yo sea su
gloria, la alegría y el honor de su vida. María, también
recomiendo a vuestro corazón maternal mis amados hijos, sed su madre, mi
ternura ciega a menudo, es a veces impotente para apartar de ellos los peligros
que los amenazan. Velad por ellos, proteged sobre todo su inocencia. Que
no olviden nunca los compromisos sagrados contraídos en su bautismo, que
no se aparten jamás de los senderos de la sabiduría, que sean dichosos
cuando hayamos pasado a mejor vida, que se acuerden de nosotros ante el Señor.
Haced que después de haber sido la corona de nuestra vida honren nuestra
memoria, con sus virtudes, hasta el día que reunidos por la misericordia
de Dios, en vuestra patria celestial, podamos bendecir allí eternamente
con vos, ¡Oh María! A vuestro divino hijo, nuestro Señor Jesucristo.
Amen. ORACION
PARA PEDIR LA SANACION FISICA Señor
Jesús, Creemos que estás vivo y resucitado. Creemos que estás
realmente presente en el Santísimo Sacramento del Altar y en cada uno de
nosotros. Te alabamos y te adoramos. Te damos gracias, Señor por venir
hasta nosotros como pan vivo bajado del cielo. Tú
eres la plenitud de la vida. Tú eres, Señor, la Salud de los enfermos.
Tú eres la resurrección y la vida. Hoy queremos presentarte todos
nuestros males, porque Tú eres igual ayer, hoy y siempre y Tú mismo
nos consigues donde nos encontremos. A
TI CATALINA AMADA Tú
tienes la belleza que inspira la musa del poeta, Tú tienes en los labios
el canto de la verdad, el amor y la fe, Tú tienes la esperanza que abraza
el campo que despierta, Tú tienes la entereza que acaricia la mano que
trabaja, Tú tienes la humildad del perfume de la rosa fresca, Tú
tienes la sabiduría que abriga el cabello cano en su silencio. Por eso,
tus virtudes inagotables engalanan las verdes trenzas de mi amada comarca. |